Cómo decorar la casa con armonía
Nuestro ritmo de vida acelerado favorece la aparición de estrés y nos impide disfrutar de las cosas realmente importantes. Quizá por eso tienen tanto éxito movimientos como la filosofía Zen, el Mindfulness, o el método Kaizen, que nos invitan a ser positivos, disfrutar del momento presente y a encontrar nuestras prioridades. Estas formas de pensamiento ayudan a mejorar la memoria y la capacidad de concentración y acaban con la ansiedad y los pensamientos negativos.
Estos principios los podemos aplicar también a la hora de decorar en casa, creando ambientes que inviten a la calma y nos liberen del estrés. La clave está en encontrar la armonía.
Armonía en decoración significa conseguir equilibrio entre colores, texturas, formas, espacios e iluminación, para que todos los elementos combinen o se complementen entre sí y formen un todo con efecto armónico. Se trata de mezclar diferentes texturas y colores con estilo evitando espacios monótonos.
Se logra armonía en los colores cuando la combinación utilizada produce una sensación agradable a la vista que transmite equilibrio y serenidad. Los colores que invitan a la calma son los que nos recuerdan a la naturaleza: los verdes de la vegetación, marrones y ocres que son colores tierra; azul que recuerda el cielo o al mar y blanco porque se relaciona con la pureza y aporta serenidad.
Los tejidos también nos ayudan a crear ambientes agradables y acogedores. Elige tejidos naturales, suaves y lavables. Los cojines y plaids además de ser decorativos y confortables, propician nuestro descanso. Las alfombras son imprescindibles para dar calidez al suelo y te ayudarán a enmarcar los espacios.
La iluminación con luz natural mejora también nuestro estado de ánimo. Lo ideal es aprovechar al máximo la luz natural y alejarnos del exceso de luz artificial. Despeja la zona de las ventanas y usa cortinas de tejidos finos y colores suaves. Cada ambiente requiere una iluminación diferente, una luz blanca e intensa debería ser tu elección en una zona de trabajo como la cocina mientras que las luces más cálidas se recomiendan en espacios destinados al descanso como el dormitorio.
Colocar plantas en casa nos ayuda a respirar un aire más limpio pero sobre todo ayudan a mejorar nuestro estado de ánimo y hacen que nos rodeemos de energía positiva. Hay plantas muy beneficiosas como el cactus que absorbe las energías tóxicas, el poto contra las malas vibraciones, la lavanda que aporta serenidad y favorece la relajación o flores como la peonía que contagia energía positiva.
Busca tiempo para disfrutar de lo importante, rodéate de personas positivas y vive cada momento sin esperar a mañana.