Gasas y muselinas para bebés, un gran regalo
Hace pocos días, preparamos una preciosa canastilla para regalar a una mamá con motivo del nacimiento de su primer bebé, entre otros muchos regalos para recién nacidos, incluimos ¡cómo no! las gasas y las muselinas, y… ¡menudo éxito! La madre, encantada, nos asegura que de todos los regalos el más práctico y al que más partido ha sacado son las gasas y las muselinas, ella no sabía que existían y mucho menos para lo que servían. Su sorpresa y agradecimiento han inspirado este post, una forma de explicar los múltiples usos de estas gasas que están tan de moda.
Las gasas y las muselinas están fabricadas en fino tejido de algodón orgánico, sólo se diferencian en el tamaño ya que las muselinas son más grandes, 120x120, mientras las gasas miden 80x80. Se diseñan con preciosos y suaves estampados, y en diferentes colores.
Tienen muchísimos usos, uno de ellos es arrullar al bebé en sus primeros días para que se sienta cómodo y protegido. Aprende a envolver a tu bebé haciendo un “paquetito” en el que se sienta seguro.
También se utilizan mucho para cubrir el carrito del bebé, sirven para resguardarlo de la luz, los ruidos o los insectos mientras duerme.
Y a la hora de dar el pecho todas las mamás están de acuerdo en que son imprescindibles. Puedes utilizarlas para taparte mientras das el pecho si quieres discreción, para proteger tu ropa cuando acabas de dar el pecho y pones al bebé para que expulse los gases, para limpiarle los restos de leche de la cara etc…
No olvides llevarlas cuando viajes, así al ponerla como sábana bajera el bebé recordará el olor familiar y no extrañará la cuna.
Además se usan como sábana para el carrito en verano, como manta de juegos en la calle, para protegerlo en el coche si enciendes el aire acondicionado, como cambiador cuando estás fuera de casa, como toalla en la piscina o en la playa… también se pueden utilizar como pañales, sobre todo en momentos puntuales en los que tu hijo tenga dermatitis, verás cómo mejora rápidamente.
Como todos los tejidos de algodón, las gasas se vuelven más suaves al lavarlas, no ocupan, se pueden llevar a todas partes y son tan prácticas que se ha convertido en imprescindibles.
Regálalas y comprobarás que no hay un regalo mejor.