Los mejores trucos naturales contra el calor del verano

Por fin llegó el verano y con él las temperaturas elevadas y el calor. Si eres de las personas a las que les gusta esta estación seguro que no te importa demasiado. Pero de cualquier manera siempre es recomendable cuidar tu cuerpo y tu piel, para que no te pase factura y puedas disfrutar completamente de esta época. Así que  te invitamos a que sigas leyendo este artículo y descubras los mejores remedios naturales para defenderte de los rigores veraniegos.

Pues sí, aunque no lo creas hay alimentos y bebidas que permiten protegernos mejor de las temperaturas altas.  El picante es uno de los más conocidos, así como las infusiones  calientes como el té. La explicación del mecanismo que se produce en nuestro interior  es la siguiente:  sube nuestra temperatura corporal y obliga a nuestro organismo  a aumentar la sudoración lo que logra refrescarnos. Por eso estos remedios son típicos de países y culturas en los que el clima es muy caluroso.

Los frutos rojos por su composición, favorecen la circulación sanguínea, lo que permite disminuir la temperatura de nuestro cuerpo. Algo similar ocurre con el tomate, que por ello se utiliza en la realización de una de las más famosas recetas del verano, el gazpacho.

También las frutas que son ricas en agua, tales como la sandía o el melón, permiten aliviar el calor al aportar líquido y favorecer la transpiración.

Y no sólo los alimentos nos pueden ayudar a refrescarnos este verano; además pueden  cuidar nuestra epidermis de la exposición al sol. Por supuesto no podemos dejar de aplicarnos cremas con factores solares elevados, pero estos trucos naturales permiten que tu piel este sana y de esta manera prevenir su envejecimiento.

Todo el mundo conoce lo beneficiosa que es la zanahoria en este sentido, pero hay muchos otros que por sus componentes antioxidantes y vitamínicos, cuidan el cutis para que su elasticidad y firmeza no se vean resentidas tras tomar el sol. La calabaza, los cítricos, las espinacas, las nueces, el marisco, las granadas o los pimientos son algunos de ellos. Por ello si los introduces en tu dieta habitual del verano estarás cuidando tu tez bronceada.

Y si algún día has sufrido mayor exposición de la debida y sientes zonas enrojecidas, también puede ayudarte un conocido remedio natural: el pepino. Triturando uno extraído directamente de la nevera y aplicado sobre las zonas afectadas notarás un alivio inmediato. El aloe vera es otro de los recursos que nos da la naturaleza para aliviarnos de las temidas quemaduras solares.

Así que ya sólo te queda coger tu toalla o pareo, meter en tu capazo tu crema, tu novela, música o lo que más te guste para disfrutar de un gran día de playa o piscina.